Expirado
Reflexiones Cátedras

Los managers deben guiarse por un sistema de valores

Horacio Fernández, profesor del Instituto Tecnológico de Buenos Aires, expuso en la Cátedra del Foro sobre el marco conceptual de la RSE y sobre lo que hace su empresa,Total.

En esta página damos a conocer su ponencia.
La Responsabilidad Social Empresaria es un fenómeno que ha irrumpido en términos recientes en la sociedad y en las empresas y por lo tanto no hay un marco teórico definido. Voy a ensayar algunas preguntas o algunas causas de por qué estamos hoy hablando con tanta fuerza de la Responsabilidad Social Empresaria, Responsabilidad Corporativa, o Desarrollo Sustentable como preferimos decir nosotros en Total.

Vamos a empezar por una de las causas más frívolas. Podríamos legítimamente preguntarnos si es una moda. Ustedes saben que las empresas por más grandes que sean no están exentas de sucumbir a las modas pasajeras. Pero las modas muchas veces tienen raíces más profundas y creo que es el caso de la Responsabilidad Social Empresaria. 

Una segunda causa importante es el poder creciente que toman las empresas como organizaciones en la sociedad moderna. Las empresas producen eficientemente bienes y servicios y tienen creciente poder económico. La contrapartida -o la otra cara de la misma moneda- es una ausencia del Estado en muchas de las actividades básicas que el Estado estaba destinado a desarrollar en el sistema formal jurídico que conocimos en los siglos 19 y 20. Entonces se da por un lado el creciente poder de las empresas y un retiro del Estado en muchas áreas básicas, o el fracaso del Estado directamente. Todo eso hace que la sociedad empiece a demandar a las empresas y a las grandes corporaciones actividades que tradicionalmente fueron de la órbita del Estado. Las empresas recogen el guante y empiezan acciones -un poco desordenadamente- en áreas elegidas un poco arbitrariamente en materia de Responsabilidad Social. 

Acá voy a hacer una digresión académica: se nota una convergencia de las disciplinas de derecho, economía y ética en todo los fueros académicos del mundo. Para los griegos estas ciencias eran una sola bajo lo que se denominaba filosofía política o ética política. Después por razones metodológicas de análisis de las disciplinas, se fueron separando y hoy nos damos cuenta de que en el fondo son la misma cosa. Por ejemplo, en Derecho hay ahora una escuela llamada “Law Economics” que estudia al derecho desde el punto de vista de su eficacia económica. En economía por su parte hay una escuela que se llama “Institutional Economics” que estudia los marcos jurídicos en donde se desarrollan los principios económicos de las economías de mercado. Finalmente, tanto en Derecho como en Economía el tema de la ética está siendo objeto de estudios muy profundos. Todas las grandes escuelas de negocio de Estados Unidos y del mundo desarrollado tienen, cada vez con más intensidad, cursos de ética empresaria y ética en los negocios. Entonces hay una convergencia de estas tres disciplinas, que tratan a reunificarse de vuelta en los curriculums académicos y por lo tanto en la sociedad. 

Otro fenómeno que se da también como razón de la Responsabilidad Social Empresaria es que -por la innovación tecnológica y la gran productividad del capital- se ha producido un desacople entre la función de producción de la empresa y la generación del empleo, lo cual produce fenómenos de exclusión social crecientes y genera problemas sociales bastante importantes que de alguna manera tienen que ser remediados, y no por la mera función de la producción que ya no da empleo a todos aquellos que lo quieren, sino que hay que hacer algo más. 

Otro problema también muy estudiado por la literatura del managment de los años ‘50 es el desacople en las grandes corporaciones entre el poder de los managers y los accionistas, la propiedad de los accionistas. Esto hace que muchas veces los managers puedan desviar fondos fuera de su estatuto legal, de sus obligaciones formales para hacerlo. O sea, adquieren un poder independiente de la voluntad de los accionistas, que son teóricamente los propietarios. 

Esto me retrotrae entonces a un famoso artículo que escribió Milton Friedman en 1970 sobre si las empresas deben tener o no obligaciones de Responsabilidad Social. Tiene una lógica impecable, de la cual se enamoran mis alumnos en el ITBA. Básicamente lo que dice es que los managers estarían malversando los fondos de los accionistas si dedican fondos a otras funciones que no sean la de optimización de la ganancia de la empresa. O sea que la única función de los managers como agentes o representantes de los accionistas es optimizar y maximizar los beneficios. Friedman dice que una empresa que se dedica a hacer acciones de responsabilidad social está no solo malversando fondos de los accionistas sino usurpando una función básica del Estado, que es la redistribución de la riqueza. ¿Porqué las empresas tienen que redistribuir riquezas si es una función que formalmente le incumbe al Estado? Pero para que ustedes vean que no estaba tan equivocado Milton Friedman, hay un párrafo en el artículo famoso en el que se cuela un concepto muy interesante. Termina diciendo que los managers tienen que optimizar las ganancias de las empresas pero siempre conformándose a las reglas básicas de la sociedad, tanto las legales como las éticas. Allí introduce sin querer, o queriéndolo, la palabra de ética, y se cuela todo el concepto de la Responsabilidad Social Empresaria.

Ese artículo salió en The New York Times Magazine en septiembre del ‘70. 

Entonces tomando como base esa frase de Milton Friedman yo pienso que la ética es el fundamento de la RSE. El problema con la ética es que no está formalizada en leyes escritas, en códigos o reglas que los abogados llamamos normas positivas y por lo tanto son principios y valores que no están, como vuelvo a decir, formalizados o explicitados en la sociedad. Entonces un gerente le pregunta a su abogado si puede hacer o no algo y el abogado le contesta que si se puede o no puede según esté en el derecho positivo, y se olvida generalmente del tema ético, básicamente porque no esta escrito en ningún lado y porque cree que no es función del abogado asesorar en temas éticos. Se trata o trataba de valores que se presuponía que estaban incorporados en la sociedad aunque no estuvieran explicitados en los códigos y en las normas positivas. 

Estos valores deberían funcionar implícitamente, como lo reconoce Friedman. Entonces la ética debió haber estado siempre presente en las decisiones de los empresarios. El problema es que la ética, al no estar formalizada, es en muchos casos no determinante o invisible en las decisiones de los empresarios. Como dijo el Principito lo esencial suele ser invisible a los ojos. Entonces la ética empresaria no aparecía hasta hace poco tiempo como variable fundamental de las decisiones gerenciales, con las graves consecuencias que se hicieron más que evidentes con las quiebras de empresas como Enron, Worldcom, etc.

Hoy la ética se explicita en los códigos de conducta que tienen las empresas, que ya pasan de ser un sistema de valores o principios generales a ser reglamentos internos de las empresas. Las empresas los están incorporando con mucha fuerza en los llamados códigos de ética. Y ¿qué es la ética? En el fondo la ética es un conjunto de reglas de conducta que permiten la supervivencia y el desarrollo de cualquier organización humana en el largo plazo. Lo que hace la ética es mirar más a largo plazo que la coyuntura. Ese es el valor fundamental de la ética, es crear buenas costumbres que permitan el Desarrollo Sustentable en una sociedad, en una comunidad o en una empresa. De allí la importancia que tiene. Ahora se están dando cuenta todas las organizaciones lo importante que es incorporar principios éticos a su conducta, en forma de códigos expresos así todo el mundo los puede ver y leer.

¿Cuales son los límites de la responsabilidad social? Ese es un tema interesante, y como es un tema relativamente nuevo es muy difícil saber en qué áreas deben actuar las empresas y en cuales no ¿Por qué se acepta que actúen educación y salud, que son áreas o resortes básicamente del Estado, y no en justicia o defensa? ¿Cuáles son los límites? Ese es un problema teórico que va a tener que plantearse. ¿Debe consensuarse con los gobiernos cada acción de RSE? Si las empresas están inmiscuyéndose en temas del Estado ¿debe obtener el consenso la empresa del gobierno en cada acción que va a hacer? ¿debe seguir los programas oficiales de educación? Hay un montón de problemas que no están claramente definidos. ¿Cómo se fija el presupuesto en una empresa para programas de Responsabilidad Social? 

Dijimos antes que el tema de la optimización de las ganancias en teoría es el único objetivo de los accionistas ¿Quién lo fija, quién decide cuánto se gasta en programas de responsabilidad social, que en teoría no van dirigidos a maximizar las utilidades? ¿Qué responsabilidades asumen las empresas cuando se equivocan o fallan o fracasan en sus programas de responsabilidad social, o cuando discontinúan un programa de responsabilidad social? Una empresa que emprende una tarea alimentaria de dar de comer a gente desnutrida, qué responsabilidad tiene cuando discontinúa ese programa. Finalmente ¿qué tratamiento impositivo deben tener los gastos en Responsabilidad Social? ¿deben ser deducibles de impuestos a las ganancias, deben ser acreditables para los impuestos a las ganancias? Son todas áreas que no están exploradas o no están definidas. Como ven, dejé más preguntas que respuestas con esta charla sobre el marco conceptual. 

Ahora voy a pasar a la segunda parte, a lo que hacemos en Total, en lo que ha definido como Desarrollo Sustentable. No lo llamamos RSE. Pasa por cinco ejes fundamentales. 

Como cuarta empresa petrolera mundial, Total tiene su objetivo en la búsqueda y la optimización de las reservas hidrocarburíferas y la generación de energía a precios competitivos. Esa es su primera razón de ser y por lo tanto es uno de los ejes principales del Desarrollo Sustentable de nuestra empresa como organización. 

El segundo eje es la calidad y el abastecimiento en productos y servicios, es decir luchar permanentemente para que los consumidores se beneficien con mayor calidad y un abastecimiento adecuado de los productos. 

El tercer eje es la Seguridad y el Medio Ambiente. La seguridad en el trabajo y los problemas ambientales son los temas que han iniciado hace varios años todos el concepto de RSE. Fue la punta del iceberg en los años 70. Estos temas han traído otros arrastrándolos, como parte de la RSE. 

El desarrollo de energías renovables es el cuarto eje importante del desarrollo sustentable en Total y, finalmente, el quinto: las relaciones con la comunidad o la política del buen vecino. Viendo brevemente ejemplos de acciones de Total en el mundo se observa la diferencia entre los problemas que está enfrentando una corporación en el mundo y los que enfrentamos nosotros acá a diario. Por ejemplo en seguridad y medio ambiente está preocupada Total por el tema de emisiones de gases, el efecto invernadero. Los accidentes de barcos también ha hecho que Total y otras empresas colegas tengan una política muy estricta respecto al tipo de buques a emplear, no solamente en las zonas de gran desarrollo industrial sino también en todo el mundo. En la tutela del medio ambiente hay un creciente movimiento por certificar plantas de la empresa con las normas ISO de calidad ambiental. En materia de seguridad hay un fuerte impulso para reducir la tasa de accidentes. 

En energías renovables actuamos bastante intensamente en materia de optimización de grandes yacimientos en Venezuela y Canadá. Tenemos fábricas de células fotovoltaicas y de paneles solares, y hemos equipado 16000 hogares en Marruecos y 15000 hogares en Sudáfrica. La energía eólica es otro de los aspectos que se está estudiando intensamente, con plantas eólicas en el Mar del Norte, y toda la problemática de los biocombustibles, o sea, combustibles a partir de materia orgánica. 

Frente a las comunidades actuamos en intenso contacto con ONGs y los gastos en responsabilidad social en el año 2002 ascendieron a 75 millones de euros. 

Volviendo al tema del compromiso ético en nuestras empresas, tratamos con productos potencialmente peligrosos como son los combustibles y actuamos en países también con cierta inestabilidad política, de manera que el compromiso ético se vuelve todavía más exigente. Creemos que tenemos que cumplir ciertas normas, aunque no estén esas normas explicitadas en los respectivos marcos jurídicos de los países donde actuamos. En materia de medio ambiente y en otros aspectos nuestras empresas aplican códigos internos propios más estrictos, muchas veces, que las propias legislaciones de los países. Tenemos un código de ética publicado en 10 idiomas. Hay un Comité de Etica en cada subsidiaria, que trata de canalizar y resolver los problemas éticos que, en forma anónima, le presentan los empleados. La transparencia y todo lo que hace al manejo corporativo son temas también muy importantes que se están dando en todo el mundo, la transparencia en los balances, en lo que se paga, en los impuestos, las regalías. Es una obligación publicar esta información y ponerla a disposición del público de todos los países. 

En la Argentina tenemos otra temática. Con la crisis en el 2002 nos hemos dedicado en Tierra del Fuego a apoyar un programa alimentario, que se llamó Aurora, con otras fuerzas de la comunidad de Río Grande. Por suerte en el 2003 hemos podido cambiar un poco el eje de nuestra acción de responsabilidad social y nos dedicamos a temas más de largo plazo, como la educación y la salud. 

En la Argentina tenemos una importante gama de actividades industriales que va desde los lubricantes hasta la industria petroquímica, hasta la fabricación de autopartes, somos el primer generador eléctrico privado y el segundo operador de Gas Natural.

Nuestros ejes en materia de RSE son educación, salud, cultura-arte, ciencia y tecnología y deportes. En eso nosotros actuamos en relación con la comunidad. 

Los requisitos que le exigimos a los programas para que sean viables son: que impacten en los lugares donde trabajamos, o sea que concentramos todo nuestro esfuerzo económico en las áreas de operación, que son básicamente Tierra del Fuego y Neuquén, iniciativa o consenso local de la comunidad donde trabajamos, excelencia de los prestadores, es decir, elegir prestadores de indiscutible capacidad técnica y moral, y la posibilidad de medir resultados, lo cual es bastante difícil de hacer pero se están elaborando métodos en todo el mundo. 

En salud concretamos un programa para la comunidad en Tierra del Fuego en el 2003. En ciencia, hemos construido un Museo-Laboratorio en la Estancia Harberton. Es un Museo de Mamíferos Marinos manejado por una bióloga, una autoridad mundial en el tema. En educación tratamos de detectar estudiantes con gran potencial que no pueden continuar sus carreras por falta de recursos, con muchachos de Tierra del Fuego, de Neuquén y de Buenos Aires. 

Finalmente trabajamos en capacitación de jóvenes políticos y funcionarios. Nuestras empresas no pueden contribuir a campañas políticas ni a candidatos, ya que es una exigencia muy rígida del código de ética, pero sí podemos contribuir a organizaciones no gubernamentales que tratan de mejorar la política, y podemos becar a jóvenes políticos y funcionarios para cursos de políticas públicas en Buenos Aires. 

CÁTEDRA ABIERTA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL Y CIUDADANA