“Las religiones, cuando colaboran, son un factor positivo de la paz social”
El teólogo y politólogo jesuita Jean-Yves Calvez señaló que las distintas confesiones religiosas pueden contribuir juntas a la formación de los ciudadanos en el concepto de Responsabilidad Social y Ciudadana, y de esa manera trabajar a favor de la reconciliación, la resolución de los conflictos y la prevención de guerras.
El presidente del Foro Ecuménico Social (en la foto junto con Carmelo Giaquinta) en la presentación de la Cátedra afirmó lo siguiente:
Participé en un momento difícil de la Argentina, en agosto de 2002, en una reunión del Foro Ecuménico Social y recibí la impresión de un gran afán de colaboración entre todos los integrantes de distintas confesiones cristianas y otras religiones. Ellos percibían la importancia cívica, política y social de tal colaboración para el buen estado de la comunidad política argentina, tantas veces amenazada por tantas cosas en los decenios anteriores. Esto confirma que las religiones, cuando colaboran, son un factor positivo de la paz social y cívica internacional. Hoy se discute esto y se las presenta como un factor de división y violencia por un absolutismo que estaría en la adhesión religiosa. Puede haber tales casos, tal interpretación de esos hechos, pero no siempre es así.
No es un dato sin importancia toda la actitud del Papa Juan Pablo II hacia el Islam; es un factor de pacificación en contra de otros factores que no vienen de lo religioso. También las religiones pueden contribuir juntas a la formación de los ciudadanos para su responsabilidad, estudiar la Responsabilidad Social y Ciudadana en sus fundamentos e historia, en las formas que debe tomar en la actualidad y esto tanto en el mundo de las empresas como en el de los municipios.
¿Hasta dónde puede llegar la Cátedra de Responsabilidad Social y Ciudadana? No hay muchos límites a priori; pienso en la reconciliación, la resolución de los conflictos y en las técnicas en lo familiar, lo socioeconómico y lo cívico, la paz y la organización internacional, y la prevención de las guerras.
Pero requiere profundización filosófica y teológica. ¿Cómo por ejemplo llegar a decir que todos somos responsables de todos, como Juan Pablo II? ¿con qué fundamento decirlo? Requiere mucha reflexión. ¿O que todos los bienes tienen como destinación a todos? Los temas de una cátedra de RSC pueden abarcar un gran número de problemas diversos, muy útiles para la formación del ciudadano.
Nuestro esfuerzo en Buenos Aires se puede extender a iniciativas locales convergentes, coordinadas con intercambios de las experiencias.
Animémonos a explorar estos distintos caminos: es lo que deseo expresar para todos en el espíritu de la reunión en la que tomé parte el año pasado. Pensemos en alguna iniciativa que pueda fomentar algo en la línea de nuestra cátedra.
