Una gran luchadora por los derechos humanos

Su trabajo, de toda una vida, apuntó a animar y promover a los más pobres. Precisamente ella recordó los comienzos de ese foro con estas palabras:

 “Era un momento muy difícil en la vida del país, que vivió una crisis como no había conocido, y considerando que la falta de ética y el olvido de los valores – tanto en la sociedad como en la dirigencia- eran algunos de los males que nos aquejaban, se entendió que era necesario un cambio social positivo”, señaló en una nota publicada en una edición del libro revista Foro E. Cambio que ella impulsó con gran energía.

Su trabajo en Cáritas apuntó a animar y promover a los más pobres, que fue título de otra nota en otra edición de ese libro revista.

Una energía positiva que irradiaba buena onda permanentemente, como vimos en su última presentación pública en el Foro, cuando esa organización anunció el Atrio de los Gentiles en la Argentina el 3 de abril de 2014. Allí leyó una carta de María Kodama (Fundación Internacional Jorge Luis Borges).

Ha dejado un ejemplo único de lucha a favor de los derechos de los más desfavorecidos, un modelo a imitar, como muchos destacaron, y ahora que no está físicamente entre nosotros su energía permanecerá para siempre con todos los que quieran seguir un camino a favor de los derechos humanos, que como muy bien remarcaba, son también derechos económicos y sociales.

Cáritas Argentina organizó un homenaje en su sede. 

Estos son algunos de los testimonios de compañeros de ruta:

• Me gusta recordarla siempre con su sonrisa y sus aportes siempre tan y tan sabios, fruto de una vida entregada hasta lo último. Seguro que Jesús, que ella supo, en los años largos de su vida, reconocerlo en los rostros de niños sufrientes, de mujeres y hombres golpeados y marginados....le habrá dicho con un gran abrazo sonriente: “Ven bendita de mi Padre, porque tuve hambre  y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber....estaba sin casa y me alojaste...” Gracias Juanita; ahora seguirás viviendo en el Cielo eterno y en el corazón de tantos y tantas que amaste hasta el fin. P. Francesco Ballarini (Presidente del Foro Ecuménico Social)
• Se nos fue una amiga, una simpática y querida amiga. Le premie Dios toda su dedicación y entrega al servicio de los más pobres e indefensos en Cáritas. Hermana Theresa Varela (Fundación Misión Esperanza).
• Juanita dejó un modelo de vida rico y desafiante. Su integridad,  su espíritu solidario, su alegría, y tantas otras virtudes, son un verdadero desafío. La extrañaremos. Pastor Tomás Mackey (Seminario Internacional Bautista).
• Con enorme tristeza la despedimos, aunque ahora sigue trabajando para nosotros desde arriba. Gonzalo Verdomar Weiss (BBVA Banco Francés – Foro Ecuménico Social).
• Contento el cielo de recibir a esta Mujer!!! Luis María Ocampo (CEAS).
• Una gran luchadora. El Señor la tendrá con El. Luis Bameule (Foro Ecuménico Social – ACDE).
• Guardamos los mejores recuerdos, con la alegría, la jovialidad y el compromiso que la caracterizaron. Un placer haber coincidido en un pedacito de vida. Baltazar Ojea (UTN)
• Un ser muy bello y así la tendremos siempre con nosotros. Marcela Goldín (Goldin R&P).
• Fue una de las personas que más hizo desde Caritas, en la Argentina, para que los pobres accedan a un terreno propio para construir su casa. Haber compartido los últimos 10 años de su vida con este grupo del Foro Ecuménico Social, fue también para ella una fuente de felicidad y entrega. Doy gracias a Dios por el testimonio de su vida. Eduardo Serantes (Comisión Nacional de Justicia y Paz - Conferencia Episcopal Argentina).
• Una pena enorme, una mujer increíble y tenaz. Su ejemplo ha dejado huella. Natalia Hopkins (Glaciar Pesquera y San Arawa).
• Juanita, tan comprometida, sensible, aguda y clara en su percepción de los problemas sociales, con tantos años de servicio a Dios y a la Iglesia. En esta docena de años del Foro tuvimos muchas ocasiones de recibir de ella tanto de bueno, y ruego al Señor para que en la felicidad eterna del Cielo reciba el ciento por uno de tanto que dio. Norberto Padilla (Fundación Navarro Viola).
• Me uno a todos y todas en la ponderación de sus virtudes. Me impactó siempre, que a pesar de sus achaques físicos y su edad continuara asistiendo a las reuniones sin quejarse, derrochando afecto y felicidad, empujando y facilitando las actividades del foro, con la misma fuerza con la que seguramente también empujaba el servicio al prójimo en otras entidades de las que participaba. Esto solo es posible gracias a una enorme fe en el Señor. Lo más que podemos hacer nosotros ahora es agradecer a Dios por esta valiosa y ejemplar vida. Él, sin duda, la tendrá acogida en su gloria en su Reino. ¡Qué el Señor nos consuele en estos momentos de tristeza! Pastor Federico Schäfer (Iglesia Evangélica del Río de la Plata).
• Me uno a todos los testimonios que dan cuenta del valor y la valía de Juanita a lo largo de su vida entregada a Cristo. Ahora que esta entrega total se ha consumado pidamos la intercesión de Jesucristo para darnos consuelo. Afectuosamente en Cristo Jesús me uno a vuestro pesar y dolor. Pastor Carlos A. Duarte (Iglesia Evangélica del Río de la Plata).
• Juanita fue un ser encantador con una capacidad inigualable para transmitir afecto y brindar esfuerzo solidario.  Será por siempre una guía para las acciones de nuestro Foro. Daniel Sabsay (FARN).
• Nuestro país necesita tanto de personas como Juanita. Otro ángel más que seguirá sumando desde donde se encuentre. Gracias al Foro por haber sido el puente para conocer a alguien tan repleto de amor, generosidad y alegría. Julio Bresso (Consultor en RRHH y RSE).
• Compartiendo un panel hace varios años, de ella dijo el profesor Bernardo Kliksberg en un seminario organizado por el Foro en la Universidad Rey Juan Carlos, de Madrid:
  • “La gente que a través de la ocupación que tiene está en el mundo haciéndose responsable del otro, se ha demostrado que tienen menos estrés, menos úlcera, menos ataques cardíacos y viven más años. Juana Ceballos, de Cáritas, un emporio de bien, tiene 77 años y es el ejemplo vivo de lo que estoy diciendo. Entonces ¿qué pasa en el cerebro de la gente que hace sistemáticamente cosas por los demás? Biológicamente se produce un neurotransmisor, una conexión entre las neuronas, que se llama dopamina. La dopamina, producida cuando se hace cosas por los demás, genera un efecto de felicidad interna. Esto nunca se va a vender en una farmacia, tiene que ver con una relación entre el espíritu, el alma, la biología, etc. Además, el que genera dopamina se hace adicto. Yo digo siempre que la Madre Teresa de Calcuta debía estar intoxicada absolutamente de dopamina. Mi recomendación: háganse adictos a la dopamina”.