El Foro Ecuménico Social desarrolló su décima campaña, en la que se continuó la capacitación a jóvenes, padres, docentes, actores de la sociedad civil, con información, pautas y herramientas para trabajar en la prevención de adicciones. Se realizaron cursos presenciales y se implementará un curso virtual, para ofrecer información y experiencias.
Con un acto en el Palacio San Martín, en la ciudad de Buenos Aires, se dio por finalizada la 10ª Campaña para Jóvenes del Foro Ecuménico Social, para la capacitación para la inserción laboral y la prevención de adicciones. Se informó sobre los cursos y talleres para 5 mil jóvenes, padres, docentes, actores de la sociedad civil, con información, pautas y herramientas. Se hizo con 4 ONG que desde hace tiempo atienden a poblaciones con grandes carencias: Casa del Niño Lourdes, Fundación Misión Esperanza, Reciduca y CEAS, a las que se sumaron organizaciones que se dedican a la prevención de adicciones: SexSalud, Proyecto UNO y Fazenda de la Esperanza. Fazenda de Esperanza además presentó el espectáculo “Fuerte sin violencia” y organizó workshops, talleres de danza, música, teatro y escenografía.
No obstante, transmitir información ayuda a afrontar el problema de las adicciones, pero no tiene el efecto que sería deseable si esos contenidos no son transmitidos por referentes reconocidos de la comunidad, líderes barriales o educadores, que los pueden presentar en actividades ampliamente reconocidas por la comunidad, como talleres de apoyo a estudiantes, de inserción laboral, artísticos o actividades deportivas.
En la Argentina en ámbitos públicos y privados hay pocas acciones en materia de prevención, y en general solo buscan dar mensajes, pero no se logra la efectividad deseada, porque falta el trabajo que apunte a la generación de espacios de contención como los citados. Sí hay dispositivos de rehabilitación, públicos y privados, pero que abordan la cuestión cuando la enfermedad ya está instalada y muchas veces con víctimas en estado avanzado de este flagelo. Es necesaria la rehabilitación pero también es muy importante dedicar esfuerzos a la prevención, precisamente para evitar los estragos humanos (y económicos) que producen las adicciones.
En cambio la prevención de adicciones que desarrolla el Foro Ecuménico Social constituye una metodología de trabajo diferente en este campo, y replicable. En todas las campañas del Foro se generan espacios de contención a través del apoyo a estudiantes, para evitar la deserción escolar, y lograr una efectiva inserción laboral de jóvenes. Con un millón de jóvenes que no estudian ni trabajan, ninguna estrategia de prevención de adicciones será eficaz. Hay que evitar la deserción del sistema educativo, en ámbitos que den un efectivo apoyo al estudiante, y que faciliten su incorporación al trabajo.
En estas campañas la capacitación para la prevención de adicciones se hace en talleres que ofrecen apoyo escolar, y formación para obtener trabajo. En otro orden, los talleres artísticos y las actividades deportivas actúan paralelamente para lograr los mismos objetivos. Dentro de ese marco, el espectáculo “Fuerte sin violencia” marcará un hito importante en esos esfuerzos de prevención.
Continuó así la labor del Foro Ecuménico Social, que desde hace más de una década realiza campañas con jóvenes de bajos recursos, basadas en valores, que generan espacios de contención para la prevención de las adicciones, entre sus numerosas acciones. Se trata de jóvenes con grandes carencias y muchos de ellos se encuentran en situaciones de pobreza extrema; viven en viviendas precarias y en entornos en donde las adicciones a las drogas y al alcohol son su ambiente.