Programa: “Prácticas Educativas y Corporales: Un Derecho de Todos”
Lo realiza con la Congregación de las Hermanas de la Cruz, en el Noroeste Argentino.
Trabajan en varias áreas, como la mejora en el rendimiento escolar, la educación alimentaria y nutricional, construir más espacios (gimnasios, salones de usos múltiples, natatorios, comedores), implementar más prácticas educativas, recreativas, deportivas y de formación laboral, mejorar la calidad de vida de familias pobres con algún familiar con discapacidad (como refacción de viviendas, descontaminación del agua), y la integración laboral de personas con discapacidad. Más de dos mil personas se beneficiaron con este programa, cifra que se triplica si se suman las escuelas, facultades e institutos que participan en las prácticas.