Confirma lo que se advertía en "Rebelión juvenil y cambio social" en los años '70, y así lo expresaron Juan José Almagro (foto), Abel Albino, otros dirigentes de ONG y empresas, y destacados expertos.
En ese libro percibía en el mundo un sistema global que manejaban un número de personas (no identificables y seguramente desconocidas entre sí) que concentraban el mayor poder y dinero, y que ese era su único objetivo. Creía que el sistema estaba en quiebra, porque tenía sus puntos débiles, porque era contrario a los valores, y que la transformación debía partir de comunidades, particularmente de las nuevas generaciones. En esa época muchos jóvenes protestaban, algunos eran pacifistas y hippies, otros eran violentos. No compartía esas opciones, porque no significaban una salida, aunque sostenía que los jóvenes tenían un rol central en la búsqueda de un cambio.
Algunos me dijeron que era una fantasía, no comprobable. Pero luego la crisis financiera superó lo que escribí en los ‘70. Y fueron los propios managers los que dijeron que “cuando el capital se vuelve impaciente los directivos se vuelven indecentes” y hablaron de “la cantidad de empresas que han quebrado dejando en la calle a centenares de miles de personas, mientras sus altos directivos se embolsaban ingentes cantidades de dólares”.
Claro que la financiera es una de las tantas crisis que conmovieron al mundo en los últimos años, que nos hacen pensar en las plagas bíblicas, con la diferencia que no son sucesivas sino simultáneas, como recordaba el pensador jesuita Jean-Yves Calvez (quien encabezó el Foro Ecuménico Social durante una década).
En ese contexto la responsabilidad empresaria es muy grande, como viene alertando Juan José Almagro (Doctor “cum laude” en Ciencias del Trabajo y RS de la Universidad de Cádiz, Profesor de la Universidad Complutense de Madrid y de la Universidad de Alcalá de Henares, Consejero de Mapfre, Miembro del Consejo Asesor Internacional del Foro Ecuménico Social) ya que hoy los hombres de negocios tienen más poder que nunca en la historia, recordando la frase del secretario general de la ONU Ban Ki Moon: “Quien tiene el poder tiene la responsabilidad”.
Esos argumentos fueron desarrollados en el encuentro de Tigre que organizó Mapfre Argentina, bajo el lema “Ética, Sociedad, Economía y Medio Ambiente para el desarrollo”, el 25 de septiembre en el Concejo Deliberante, con el apoyo de ese municipio y el auspicio de varias instituciones, entre ellas el Foro Ecuménico Social.
Allí Almagro sintetizó el espíritu de la reunión con la consigna “La ética como fundamento de la RSE”, quien comenzó su charla con esta frase: "Aún cuando nuestro conocimiento parte de la experiencia, no surge todo de ella", de Kant.
Y agregó que “la prosperidad económica no esta siempre acompañada de un paralelo progreso social”. Abordó luego la “engañosa globalización", para señalar que “el poder no lo controlan los políticos, y la política carece de poder para cambiar nada", parafraseando a Zygmunt Bauman. La conclusión inevitable es que “quien tiene el poder debe asumir su cuota de responsabilidad”.
Pasó después a su “Manifiesto por la RS”, con estos principios:
- La RS es una forma de concebir la función social de la empresa en la nueva Sociedad.
- Ni las empresas ni la Sociedad pueden dejar que la desigualdad se instale en su seno.
- Políticas públicas que velen por la sostenibilidad y sean referencia para fomentar e impulsar la RS.
- Un nuevo contrato social. Los ciudadanos, protagonistas.
- La RS como firme respuesta a los retos de la globalización.
- Lo social es de todos. Lo que implica hablar de:
- Sostenibilidad.
- La impaciencia del capital.
- Esfuerzo, trabajo, decencia.
- La búsqueda de la felicidad como interés general.
Hacia el final instó a compartir valores:
- Ética de los ciudadanos y de la modernidad, además de una ética de mínimos: libertad, igualdad, fraternidad.
- Ética como saber para actuar de un modo racional.
Para concluir con un frase de Jorge Luis Borges en “Informe de Brodie”: “Creo que con el tiempo mereceremos que no haya gobiernos”.
El tema de los valores fue ovacionado en la conferencia de Abel Albino (Fundación CONIN), y estuvo presente en el panel que me tocó moderar, con Gustavo Grobocopatel (Los Grobo) y Adalberto Steinfeld (Intersindical.com). Y también fue una cuestión alrededor de la cual giraron las otras ponencias, de Horacio Cristiani (Gas Natural Fenosa – Cáritas - CEADS), Agustín Salvia (Observatorio de la Deuda Social Artgentina, UCA), Sebastián Bigorito (CEADS), Marcela Guerra (Dow Argentina), Nicolás Maggio (Fovisee), Diego Moreno (Fundación Vida Silvestre), José María Fanelli (Economista Investigador del CEDES y CONICET), y también en los trabajos del Concurso RS2020 organizado por Mapfre Argentina, que ganó Sebastián Lapadula, y que entregó Julio Bresso (Mapfre) y Julio Zamora, presidente del Concejo Deliberante de Tigre.
Por el Foro Ecuménico Social participó también la Hermana Theresa Varela, presidente de la Fundación Misión Esperanza.
Fernando Flores Maio
