Un gran cantidad de servicios y acciones sociales se desarrollaron a partir de la extraordinaria capacidad de quien fuera su fundador, el Padre Mario.
Cubren necesidades básicas, físicas, psíquicas y sociales de pobladores de González Catán, en La Matanza, provincia de Buenos Aires.
Para concretarlos se invirtieron más de 50 millones de pesos y trabajaron más de 550 personas por año. La lista de resultados es enorme. Algunos ejemplos: ofrecieron más de 26 mil prestaciones educativas, 328 mil prestaciones médicas, 200 mil medicamentos y vacunas, casi 2 mil prestaciones para personas con discapacidad, más de 11 mil prestaciones para tercera edad, más de un millón 300 mil kilos de alimentos, 300 mil prendas y calzado entregados, y 54 mil prestaciones deportivas.